La Pradera Sin Ley

La Pradera Sin Ley, también conocida como la pradera sin madre evoca una época de grandes descubrimientos que serán redesvelados a través de este blog. Todo lo que aquí se describirá tuvo existencia real (aunque fuera por momentos).

8.7.06

Las cosas del querer... y no poder.

Un hombre de 68 años recibirá más de 400.000 dólares en una demanda contra el fabricante de un injerto que lo dejó con una erección que no ha cedido desde hace 10 años. Charles "Chick" Lennon recibió el injerto de acero y plástico en 1996, aproximadamente dos años antes de que saliera al mercado el medicamento contra la disfunción eréctil Viagra. El injerto Dura-II estaba diseñado para permitir que el usuario provocara una erección artificial con el fin de poder tener relaciones sexuales y luego abatiera el pene a voluntad. No me imagino cómo puede uno abatir el pene a voluntad, si por algo lo llaman el miembro pensante
Por razones no aclaradas, Lennon no pudo colocar su pene hacia abajo de nuevo. Su abogado dijo que no podía retirársele el injerto por riesgos de salud, incluyendo una cirugía a corazón abierto a la que se sometió.
Su abogado, Jules D'Alessandro, agregó que su cliente se volvió una persona solitaria y que se sentía incómodo al frecuentar a sus nietos.Lennon ganó un juicio contra el fabricante del dispositivo en el 2004 y un jurado le otorgó 750.000 dólares. Sin embargo, un juez consideró que el pago era excesivo y lo redujo a 400.000. El viernes, el Tribunal Supremo de Rhode Island confirmó el pago en una decisión sobre un detalle procesal.
Pero qué cosas pasan... la hostia.