El cura que no quería dar misa

Alberto Barrilero Ortiz, párroco de Peñacoba, abandonó ayer por la tarde la iglesia en medio de una misa tras acusar a los feligreses durante la homilía de levantar falsos rumores contra su persona. Además, se negó a oficiar más actos religiosos en la localidad.

El cura acudió a la iglesia de esta localidad de medio centenar de habitantes y que pertenece al Ayuntamiento de Santo Domingo de Silos a las 19.00 horas para oficiar la misa semanal, cuando, al llegar a la homilía, aseguró ver «caras de odio» en los feligreses, por lo que se negó a continuar con el oficio religioso.

Tras este episodio, el párroco se fue a la sacristía del templo, donde acudió también un vecino del municipio para pedirle que continuara con la misa, a lo que respondió que no, tras lo que se cambió de ropa e intentó abandonar la iglesia.

Una vez fuera, los vecinos le pidieron explicaciones sobre su comportamiento, a lo que Barrilero Ortiz respondió que algunos feligreses de esa parroquia habían levantado falsas acusaciones contra él. En concreto, aseguró que había corrido el rumor de que él mantenía relaciones sexuales con una feligresa, a la que va a visitar porque se encuentra enferma.

Tras dar esta explicación, el cura se dirigió concretamente a una mujer que permanecía en el lugar y vertió sus acusaciones directamente sobre ella.

Alberto Barrilero Ortiz lleva alrededor de un año y medio encargándose de la parroquia de este municipio burgalés, así como de la de los términos municipales de Hortezuelos, Hinojar de Cervera y Espinosa de Cervera.

No es la primera vez que acusa a los feligreses de hechos similares, ya que, durante la homilía de la misa de hace dos semanas también lanzó varias acusaciones veladas, informa Europa Press.

El cura está a la espera de un traslado al municipio de Cilleruelo de Bezana que será efectivo en el plazo de un mes, tiempo en el que se ha negado a oficiar actos religiosos en la localidad.